sábado, 8 de diciembre de 2007

Ciegamente triste

Me canso de vivir. Felizmente encuentro una banca, y en ella un persona de edad, entrecruzando sus brazos, tomando un bastón. Es ciego.
Le hablo: ¿Cómo le trata la vida?
El tipo me responde: Como un gran laberinto, inmenso... Por eso me siento, en esta banca, tranquilo, esperando que alguien me encuentre.

Le sonreí, esperando que el señor Borgues haya sentido el calor de esa respuesta en mi sonrisa...

1 comentario:

Anónimo dijo...

Me parece que te haz vuelto un borgiano, aunque muchas veces borges me parece un tipo rechevre siempre he olido en el la farsa del mismo personaje borges, un tipo ironico y travieso con sus comentarios.